martes, 16 de septiembre de 2014

Nos arroja el viento de Sandra García





Tímidos en una tarde de verano
cohibidos sin mirarnos aguardando
de quien se atrevería a dar un primer
paso
 Desciende una ráfaga del viento
besando nuestras mejillas
arrojándonos a la labor de enamorarnos
 Temblorosos fijamos nuestros ojos
rondando cautivos, pretendiendo unir
nuestros rostros
 Se acerca el acecho deseoso
de sentir el calor de los labios.
Fusión, suave e infinita llena
de mariposas con estrellas
en el vientre
 Aire, necesitan , aire para
respirar su presencia clavada
en sus corazones
 Despacito unen sus manos
prendiendo calor y fuego
apresurando  ventisca
Sandra García

   © Derechos reservados

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